Es triste ver que ciertas costumbres se han traído de vuelta a este nuevo siglo. La historia es para recordarnos nuestros errores, y fortalecer nuestro futuro; sin embargo, ciertas personas sencillamente aún no entran en razón.
Las acciones llevadas a cabo por el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aún no cobran sentido. Es clara la intención de ofender a Colombia, pero ¿A qué costo?
La letra “R” se ha convertido en un “alivio”, para aquellos que aún no reciben la letra “D”, en la puerta principal de su vivienda. Es incomprensible cómo se es capaz de traer de regreso las metodologías de la Alemania Nazi, para identificar a los impuros, con el fin de sacar grotescamente de sus hogares, y arrebatar la vida que con esfuerzo han forjado, a los habitantes “inmigrantes” colombianos, con el precepto de que representan una amenaza para Venezuela, cuando el pretexto por el cual ha comenzado oficialmente estos actos inhumanos, empezó realmente por un individuo del propio país.
Al observar de cerca el “Estado de Emergencia” declarado por el presidente Maduro, lo único que se puede concluir es que, en efecto, es una verdadera farsa. El fundamento que lo soporta es para darle continuidad al teatro que ha armado, con el fin de que a los ojos del mundo, tenga la razón en cuanto a las medidas que ha tomado. Eso es en definitiva, caer bajo; buscar la lástima de otros, para adquirir un lugar en el mundo.
Es lamentable la situación en la que se ve envuelta la población de Venezuela, pero francamente, necesitan un presidente cuyas acciones estén impulsadas por la búsqueda del bienestar, y no con fines recreativos.
No considero que los colombianos seamos mejores y probablemente tampoco hayamos elegido el mejor presidente, incluso tiene razón en cuanto a las acusaciones de contrabando y con relación al paramilitarismo, pero no toda la población colombo-venezolana, que habitaba dentro de su territorio, se merece recibir tales acusaciones, especialmente cuando, según la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), deberían ser tratados como refugiados al haber llegado a Venezuela huyendo de la violencia en Colombia.
Cabe mencionar que esa flecha va en doble sentido, no debemos abstenernos a creer que es falso. El pueblo venezolano también ha tenido remuneraciones sustanciosas al vender lo que a ellos el gobierno les da como subsidio, en nuestro país, y no por esto, a los inmigrantes se les ha sacado como un plumón que quita el hollín de la chimenea.
La solución a los problemas económicos y de seguridad de Venezuela, no deben ser los movimientos anti-colombianos llevados en la frontera. La problemática es un recordatorio de los errores que han cometido, y de los cuales no han sacado mayor provecho. No se puede esperar que al expulsar toda la población Colombiana y colocar las ciudades en estado de emergencia, aunque claramente no lo estén, va a solucionar los problemas de inflación, los problemas de desabastecimiento, el descontento de la población, entre otros.
Existen recursos y estrategias para detener los problemas en la frontera, de forma más honorable, moral, diplomática y definitivamente más humana; reforzar la seguridad en esa zona, combatiendo la corrupción de los funcionarios que la vigilan, entre otros, son herramientas que debe considerar un presidente, antes de tomar acciones ofensivas contra la población de un país vecino, especialmente cuando, en nuestros días, la fuerza de trabajo es un factor productivo importante.
Escrito Por: Ana María Díaz Espinosa
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http://www.bbc.com/mundo/noticias/2015/08/150825_venezuela_conflcto_frontera_dp
http://www.theguardian.com/world/2015/aug/24/venezuela-colombia-deportation-border-crackdown
http://www.bbc.com/news/world-latin-america-34093700
Imagen extraída de:
EL CONFLICTO DE LAS LETRAS 
Me parece que el articulo tiene mucha razón respecto al tema de la problemática entre Colombia y Venezuela, y es cierto que el problema se esta abordando de una forma muy inhumana, la cual en un futuro puede traer mas que todo repercusiones para ambos países, lo cual no creo que se algo factible en este momento porque al menos en Colombia la moneda se ha devaluado mucho y los precios de muchos productos se han disparado, pero si los 2 países solucionaran sus “problemas” entre si, se podrían tomar medidas y hacer que la calidad de vida de ambos “bandos” mejore.
Considero que al final de cuentas el presidente maduro hace todas esto para tener a las personas con algo de que comentar, tenerlas entretenidas para desviar posiblemente la atención de algo mas que este sucediendo en el trasfondo.
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Consideró que el punto que mi compañera ha tocado, es primordial. El presidente Maduro ha realizado todo este ”show” para poder desviar la atención de los problemas que están viviendo en Venezuela, es contradictorio que tilden a los Colombianos de narcos, guerrilleros y delincuentes pero muchos venezolanos aprovechándose de la situación, deciden convertirse en deportados colombianos para mejorar su calidad de vida.
De igual forma ese tira que jala que hay entre las dos naciones es un poco desgasta te y además innecesario puesto que en realidad los que se van a ver afectados en un futuro y suena triste es el pueblo venezolano.
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En mi opinión, tiene mucha razón en todo lo que expone, es un problema que nos compete a todos y estoy en total acuerdo. No me parecen, en lo absoluto, las medidas que está tomando el presidente de Venezuela, Nicolas Maduro, para querer mejorar a su país, no es la manera y pienso que está siendo inhumano. Excelente trabajo.
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